Cuando era pequeño,siempre me gustaba oír las anécdotas del abuelo,nunca supe si realmente eran reales o ficción siempre hablaba de proezas.
También oía los consejos de mi tío Antonio (Q.E.P.D)muchos de ellos aplicados ahora en este trajín de la vida.
Uno de ellos es que siempre debemos de soñar con un mundo mejor,libre de ruindades,en el que los hombres fuesen más buenos,donde el trabajo y el pensamiento rindiesen su fruto en beneficio de los que trabajan y dan vuelo libre a sus propias ideas.
Siempre un buen consejo oportunamente puede evitar una desgracia,puede evitar que un hombre que extravió su senda pueda encontrar de nuevo el camino,puede evitar que un matrimonio en discordia rompa el vinculo sagrado,puede evitar que los hijos caigan en las drogas,puede evitar pena y vergüenza,puede evitar inquietudes y complicaciones.
Un buen consejo vale más que todo el oro del mundo y más cuando este se da de corazón.
Gracias tío Antonio (q.e.p.d) por tus consejos tan oportunos sin ellos no seria lo que soy.
Gracias Toñito por aconsejar a mis hijos,para que el día de mañana sean hombres de bien.
Saludos...Ciao
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